He revisionado JFK, que a mi juicio ha perdido algo de fuerza con años pero que sigue siendo una película estimable, ciertamente interesante aun cuando la hallo especulativa y un blanqueamiento de la imagen de Jim Garrison, un fiscal prevaricador que menoscabó la buena imagen de Clay Shaw, un hombre respetable contra el que no había prueba alguna; un hombre inocente. Precisamente, y aunque se difame al señor Shaw, la interpretación de Tommy Lee Jones es lo que más disfruto del film, seguida de la Donald Sutherland con sus elucubraciones.