Vista esta noche, y mi critica es lo que dijo Kapital y mi granito de arena: la película es cojonuda.

Ben Afleck no ha sido nunca un actor que destaque por su capacidad de transmitir emociones con su cara, ahora un poco menos que antes, pero para hacer el papel de autista el papel le iba de perlas, lo bordo.

Escenas chorras: me hizo mucha gracia ver a la Kendrick que se supone que hacía de chica sencilla, contable y poco comunicativa socialmente total y perfectamente maquillada en todas las escenas, sobre todo me llamo la atención cuando Ben llega al hotel y aparece ella dormida en el sofá en 1º plano. La otra escena es cuando están en la casa de Ben y J.K. pone los pies encima de la mesa de centro y se ven las suelas de sus zapatos, perfectamente limpias y nuevas, pero campeón que se supone que has estado caminando con el zapato por el jardín un minuto antes, y no te compraste los zapatos de camino a Chicago.

Vamos, tonterías, película muy entretenida que se hace corta y que es bastante recomendable para disfrutar en un cine.