A lo mejor el pobre hombre tenía a su madre ingresada en Urgencias, después de una caída en la que se había roto la cadera -la pobre mujer-, y acababan de llamarle al trabajo para darle la nefasta noticia:"Paco, ven corriendo que la mamá se ha caído en la calle y se ha roto la cadera. Estamos en la UCI del General. ¡No tardes, por Dios!" (sollozos).