Hace tiempo que estaba dándole vueltas a esta idea y ahora, por fin, me decido a compartirla con el foro.

Se trata de establecer unas prioridades que nos permitan decidir si la película (voy a hablar de películas pero puede aplicarse a series o dvds musicales) que vemos en la tienda o en la red, y nos tienta a rascarnos el bolsillo, se merece o no ese sacrificio.

Parto de la base de que todos tenemos un presupuesto limitado y –muy importante–, de que el dinero que se destina a un dvd se está quitando de destinarlo a otro.

Así pues ahí van 10 sencillas preguntas que todos deberíamos hacernos antes de pasar por caja.

(Nota: los ejemplos propios son eso, ejemplos propios, basados en gustos personales. Cada uno que los cambie por los suyos, que seguro que los tiene).

1. ¿Me gusta la película?
Parece de Perogrullo, pero es lo primero que hay que tener en cuenta. ¿Quien no se ha comprado una peli por su sonido, sus extras o su presentación? Es un error.
(Ejemplo propio: ¿Qué coño estaba pensando el día que compré El Pacto de los Lobos?).

2.¿El dvd contiene la película que me gusta?
Si lo que me ofrecen es una versión mutilada, censurada, coloreada o remontada tengo que pensar si es lo que quiero o me espero a que me la ofrezcan en condiciones.
(Ejemplo propio: Quiero la versión íntegra de La puerta del cielo, no la que hay en el mercado).

3.¿Podré disfrutar de la película como es debido?
Es decir: con su formato original, el idioma en que quiero oírla (original o doblaje), los subtítulos necesarios...
(Ejemplo propio: No compraré La joven de la perla hasta que tenga el formato adecuado).

4. ¿El producto tiene la calidad técnica suficiente?
Que la película esté íntegra, en su formato y con su idioma y sus subtítulos no quiere decir que su imagen, su sonido o su navegación sean los que yo exijo. Cada uno tiene sus límites, por supuesto, y lo que para uno es bueno para otro es intolerable.
(Ejemplo propio: una película panorámica no anamórfica me echa para atrás; la ausencia de 5.1 no tanto. A otros les pasará al contrario).

5. ¿Quiero extras y me los dan?
Hay gente para la que los extras son imprescindibles y otros que pasan del tema. Si se quieren extras y no se ofrecen o éstos son raquíticos hay que pensárselo.
(Ejemplo propio: Para mí la ausencia de extras no es un factor decisivo, pero jode mucho saber que en otros países tal película si los lleva y aquí no)

6. ¿La presentación me gusta?
Estuche, carátula, folletos, cajas, regalos... El coleccionista valora una buena presentación.
(Ejemplo propio: cuando enseño mi colección a alguien siempre saco la EC de Master and Commander o la de Titanic. Da gusto ver ediciones así).

7. ¿Quiero “esta” edición?
Todo va bien. Llevo 6 síes en el decálogo. Pero sé que hay una edición vietnamita de la película con un estuche de piel de mono bizco y que regala una camiseta firmada por el ayudante de la script, y no voy a poder vivir sin ella. ¿Qué hacer? Respuesta: mandar un e-mail a Vietnam.
(Ejemplo propio: Viendo la edición de Memento que circula por ahí fuera no creo que compre nunca otra que no sea igual).

8. ¿El precio es el adecuado?
Si llevas siete síes, el precio es bueno sea el que sea. Pero siempre hay distribuidoras abusonas y rebajas a la vuelta de la esquina.
(Ejemplo propio: algún día compraré el Episodio III. Pero no a 21 euros).

9. ¿Quiero esta peli ahora?
¿Puedo esperar? ¿La voy a ver este fin de semana o dentro de un mes (o de seis)? ¿La descatalogarán? ¿Bajará de precio? ¿Sacarán una EE, o EC o Mega EC? ¿Espero al Blu-ray o al HDD?

10. ¿Tengo otra prioridad?
La pregunta del millón. Todo son síes, pero hay otra peli con los mismos síes (o con síes más importantes) que debe tener prioridad. Consejo: no te saltes tus propias prioridades.

Y ya está. Aplicar este sencillo decálogo es la solución para no empezar el mes pensando en comprar la segunda temporada de Corrupción en Miami, Los 10 mandamientos edición aniversario y el pack de Comedias y proverbios de Rohmer, y acabar con un variopinto lote de ofertas del quiosco, Memdiamarkt y el Corte que no llegan ni a cuatro síes. Y que es lo que me ha pasado a mi.