El fin del celuloide ¿a la vuelta de la esquina?


Para finales de 2013, la distribución de películas en formato analógico (celuloide) puede llegar a su fin. Al menos esas son las predicciones de CinemaCon, la feria de propietarios de salas de cine y la industria cinematográfica americana (que se celebra la semana que viene en Las Vegas).

Desde que el cine es cine, las películas se han distribuido en "latas redondas" que contienen rollos de celuloide (película fotográfica), pero parece que cuando finalice 2013 este sistema será cosa del pasado.

Esta noticia, que puede ser algo chocante para muchos, no debería serlo para quienes siguen de cerca la realidad del celuloide. Ya en 2011 John Fithian, representante de la industria, declaraba: "Nadie debería mantener la dependencia en la distribución en film mucho tiempo más".

Para leer el artículo completo, en inglés: The end of celluloid reel films is near, warn industry insiders

Lo cierto es que tras la adaptación a formato digital de un gran número de salas a nivel mundial, la industria cada vez estaba presionando más para ajustar costes, y una de las formas más directas de recortar era cargarse directamente la distribución de soportes físicos (copias en film) a cada sala, por el problema logístico y económico tan enorme que eso siempre ha representado.

Ya en 2011 asistimos con tristeza a la bancarrota de Kodak, una de las grandes suministradoras de película cinematográfica con la que se han creado cientos de miles de obras del séptimo arte y de la fotografía. Pero la industria se ve obligada a una huída hacia adelante, y la eliminación de soportes físicos implicará un ahorro incalculable en distribución de copias a las salas.

Sí, por desgracia ello implicará que muchas salas no puedan afrontar el cambio a digital y se vean abocadas al cierre. No sabemos cómo encajarán los cines europeos este último golpe, que se suma al descenso alarmante de espectadores, al azote de las descargas digitales, al éxito del cine en casa y recientemente a la salvaje subida del IVA, pero después del cierre en España de diversas multisalas, cines míticos de ciudad e incluso distribuidoras como Alta Films, tendremos que sentirnos afortunados de poder ver una película en sala oscura.

Nota: Artículo traducido parcialmente de Digital Trends.