Mil gracias Musashi, aunque no me cansaré de decirlo. Esta colección ha crecido con las sugerencias, aplausos y tomatazos de todos vosotros. Aunque una colección sea algo muy personal, y en el fondo el que tiene que valorarla es su poseedor, un coleccionista no es nadie sin nadie con quien compartirla.

Tengo la suerte de compartirla con mi familia, mis amigos y con vosotros, compañeros, y eso es lo importante.