Que cierre un género no implica que no se puedan hacer más Westerns. De hecho, espero y confío que se sigan haciendo pero la verdad, los últimos, desde Open Range, hasta el cobarde Ford ese, o la australiana, son meros intentos de desmitificación sin, para mi demasiado éxito. Y los otros son como el remake de 310 to Yuma. Es decir nefastos. En un momento en que francamente, el Western no es el género más popular, y del que no creo que se gane nuevos adeptos según vaya pasando el tiempo, Sin Perdón ofrece la última mirada mítica de ese tiempo y ese lugar. Conjuga presente y pasado a la perfección, y a día de hoy, para mi sigue siendo el último Western, por encima que se hagan otros. Hablar de cierre de género es una forma metafórica de hablar, está claro, pero creo que no anda muy descaminado.