Dos cosas:
1. Aunque de soslayo se critique el sistema corrupto de Wall Street en general (alguna conversación como la de MM, o los mismos monólogos del personaje principal a pantalla, a nosotros, o incluso cuando en la visita del policía, aquel le dice que sabe todo lo que se cuece allí, señalando a WS y las grandes firmas que tejemanean con total impunidad), como se ha dicho, la película se centra en nuestro personaje y en cómo vive ese ascenso meteórico, él, y por influencia directa, todo el que le rodea. No se puede generalizar porque estafadores, ha habido muchos, pero con las características de este, muy, muy pocos. ESO es lo que nos quiere mostrar.
2. Y lo hace desde el tono de comedia, en algunos momentos, divertida, inocente, en otros corrosiva, y en otros, vulgar, y me encanta que lo haga así. Porque el abordaje serio de la cuestión, lo hemos visto en bastantes películas. YO quería un exceso y como Marty, no me lo va a dar nadie.
3. En este sentido, es paradigmático el uso de las drogas. Obviamente está llevado al exceso, pero es que el tono de la película permite estas "licencias". Me encanta en este sentido, como la realidad que vive el personaje difiere cuando esta "puesto" a cuando se nos desvela la escena contada a modo de "flashback". El ejemplo es el del coche o el de la llegada a casa de madrugada en helicóptero, etc... Por eso, no hay tanta cosas imposibles en pantalla, sino una visión alterada de la realidad del personaje, pero que ante sus ojos, se muestra muy real.
En definitiva, yo me dejé llevar y me atrapó. Algunas cosas me chocaban, pero al momento la misma película me hacía entender el motivo de su inclusión. Muy poco, por no decir casi ninguno (cineastas) tienen la capacidad de seducir y enganchar al espectador como Scorsese, y nada menos que durante tres horasMi vejiga (permitidme la expresión) da fe de ello.