Últimamente hay dos anuncios que no aguanto.
Uno es el de una telefonía móvil en el que una chica tararea el himno de la alegría. Se me hacía francamente odiosa. Hace días que no lo veo (por suerte).
El otro es el hombre que compra en un supermercado y no para de gritar porque le dura la emoción de ya no sé qué relacionado con el mundo del motor. La idea es divertida, el resultado más bien no. Pide a gritos quitar el sonido de la TV.![]()
Bueno y ya más de hace unos meses... el niño que simulaba conducir un coche haciendo el ruido de aceleración sin la transición de los cambios de marcha... parecía que se le iban a salir los ojos de las órbitas, pobre chaval. Pues lo mismo que el anterior.
Digamos que éstos son molestos por su "audio". Anuncios odiodos por otros motivos,... últimamente creo que no tengo ninguno especialmente destacado en mi lista negra. :8)