Bueno, pues nueva revisión de mi hipoteca, y la cuota que me ha subido 90 euros. Eso supone una pérdida adquisitiva de más de 1000 euros anuales.

:cabreo

Menos mal que aún tengo bastante margen de maniobra ante más subidas. Es lo que tiene vivir en un pueblo donde los precios están bastante más asequibles.

En cambio ya hay un caso en mi familia que puede ser indicativo: unos primos, simples curritos ambos, tienen que vender su casita de ensueño a 40 Km de BCN (adquirida de segunda mano casi de saldo porque la vendía una pareja que se separaba), ya que no pueden pagar la hipoteca antes las contínuas subidas del euríbor.

¿Cuantos casos como estos habrá?


Por otro lado:

El precio de la vivienda usada bajó el segundo trimestre en Barcelona
  1. • El metro cuadrado cae en todos los distritos de la capital catalana y se sitúa en 4.825 € de media
  2. • El cambio de tendencia estabiliza el coste de los pisos antiguos en Madrid, pero no en Valencia




EL PERIÓDICO
BARCELONA
La vorágine de precios en que ha vivido la vivienda usada en España ha tocado a su fin. Mientras que la vivienda nueva ha moderado la tendencia alcista de los últimos años, y subió un promedio del 4% en España en los primeros seis meses del año, la de segunda mano ha dado un frenazo en seco. En Barcelona, por ejemplo, los pisos que ya han sido habitados bajaron el 1,3% entre marzo y junio, lo que no sucedía en toda la década.
Si la espiral de precios fue particularmente intensa en la vivienda usada, que en muchos casos se ha pagado a unos precios por metro cuadrado superiores al de las nuevas edificaciones, el cambio de tendencia en el sector inmobiliario también parece afectar con mayor intensidad a los pisos de segunda mano.

PARADOJA COMPARATIVA
No solo porque la moderación en la evolución de los precios concluye --en el tercer trimestre subió el 0,7%; en el cuarto, el 0,9%; y en el primero del 2007, el 0,5%--, sino porque en los últimos tres meses el valor promedio del metro cuadrado descendió hasta situarse en los 4.825 euros. Una cifra que todavía queda muy por encima, paradójicamente, de los 4.454 euros a los que se realizaron la mayoría de tasaciones de viviendas nuevas en la capital catalana durante los primeros meses del 2007.
El fenómeno no es exclusivo de alguna zona concreta de la ciudad, puesto que todos los distritos de la capital han registrado bajadas de precio según el informe de la mediadora inmobiliaria Idealista.com, que tiene en consideración una muestra de 10.689 viviendas de segunda mano puestas a la venta a través de su base de datos en internet.
Si se analiza la evolución de los precios por distritos, el de Les Corts es que presentó la mayor caída: el 3,2%. Allí, el precio medio del metro cuadrado se paga a una media de 5.469 euros. El único barrio que encadena tres trimestres consecutivos con descensos en el valor de la vivienda usada es el de Gràcia, mientras que en Sarrià-Sant Gervasi --el distrito más caro de la ciudad-- la caída es menor, de apenas el 0,2%.
Si se traslada el análisis a las poblaciones de la provincia, también comienza a tambalearse el negocio de la vivienda de segunda mano. Viladecans (-8,1%), Sant Boi de Llobregat (-5,3%), Sant Cugat del Vallès (-5,1%), Gavà (-4,6%), Manresa (-4,4%), Cornellà (-4,1%), Sitges (-2,3%), Rubí (-1,5%), Sabadell (-1,4%), Santa Coloma de Gramenet (-0,9%), Terrassa (-0,7%) y Mataró (-0,5%) son algunos de los municipios representativos en los que el decrecimiento de precios entre marzo y junio es evidente. Otras zonas, como Igualada, Vilanova i la Geltrú, Castelldefels, Esplugues, El Prat y Sant Feliu de Llobregat, mantienen precios todavía alcistas en el mercado de la vivienda que ya ha sido utilizada y que oscilan entre el 0,4% y el 5,1%.

EQUILIBRIO MADRILEÑO
Según los técnicos de Idealista, que analizan la mayor base de datos del mercado inmobiliario, en Madrid y su área de influencia los precios se han mantenido prácticamente invariables en el segundo trimestre. Si en la capital se produjo un inapreciable incremento del 0,1% en el precio del metro cuadrado, en más de la mitad de los municipios de su área de influencia la tendencia también fue bajista.
Esa tendencia que no se da, por ejemplo, en Valencia y su área metropolitana. Esa zona del Levante mantiene todavía reminiscencias del boom inmobiliario y aún registró incrementos del precio del 1,2%.