Yo no entiendo, Carmilla, esa fijación por el tal Relaño. Dice gilipolleces y hace el papel, como en su faceta de culé recalcitrante desempeña Casanovas. Eso vende, hacen caja y cobran un sueldo.
El problema de la fé que tenéis en este tío, es que hacéis extensibles sus formas al resto de los mortales seguidores de un determinado equipo. Es lo más facil y más sencillo.