Pues imagina la historia de "Cómo Entrenar a tu Dragón" hecha foto-realista y sin adaptarla, tal cual. Para nada sería el mismo resultado emotivo. Y es que no sólo es el foto-realismo, es que el ritmo de la animación fantástica no tiene nada que ver con el de la acción real, es todo más dinámico y acelerado.




LinkBack URL
About LinkBacks

Citar
