Lo llamo así por aquello de que son títulos de tu debilidad. O sea, que yo soporto relativamente bien que te cargues a Scott, por ejemplo, pero no soporto que ataquen de forma sangrienta algunos de mis títulos más queridos.
¿Un ejemplo? Drácula, de Browning. Ocurre que leo las críticas con el gesto extrañado, como cuando alguien dice: "La langosta es un plato indigesto, vomitivo...". Algo así. Ya ves.