Me ha gustado mucho. Me he hallado enganchado de principio a fin con el romance de Scott Eastwood y Britt Robertson, y de la mitad al final con el de Jack Huston y Oona Chaplin, a los que al principio casi despreciaba. Brillantes interpretaciones de los cuatro. Emotivo epílogo. Y las escenas de rodeo sobresalientes, ¡brutales!
8/10