Es irónico, porque siendo teóricamente certero que, crematísticamente hablando, es la película número 1 en el mundo TAMBIÉN lo es el hecho de que NO ha cumplido siquiera las expectativas más prudentes al respecto (más allá de 75 y rondando los 80 millones. Las más optimistas bordeaban los 100).
Habida cuenta de las cifras (publicidad incluida, se habla de 550 millones para cubrir presupuesto), los porcentuales de retorno en mercados internacionales, la tibia recepción aparentemente generalizada, el inobviable contexto epidémico y demás... igual se nos presenta un escenario "interesante" al respecto.