Algo que quería proponer ya hace tiempo, es una práctica que suelo hacer a menudo, que es englobar un par de películas que por intenciones, contenido, estética o simplemente parecido no intencionado puedan visionarse juntas para así enriquecer el visionado global de ambas.

Ahí va mi aportación:






Dos obras, clásica la primera y denostada la segunda, con el poder mental como tema principal y con momentos de acierto visual antológicos.