- Una pequeña sorpresa de la cartelera de agosto. Lo más interesante es el papel atípico de actores, que suelen aparecer en círculos comerciales y aquí se desmelenan que da gusto. Coincido con vosotros en que Mark Wahlberg es de lo mejor, como luchador antisistema radical, hasta las últimas consecuencias.
El trío de surrealistas detectives-psicólogos (Dustin Hoffman y su bolsa de cremallera para meditar, Lily Tomlin tan teatral, como hace veinte años y la gran Isabelle Huppert con su cara de palo) merecería una nueva aventura fílmica.
Atención al personaje de la abuela española, que parece el moreno de Cruz y Raya, cuando hace de vieja con la garrota.

- La anécdota del sandwich de mayonesa...