Literalmente, no ligeramente. Y el "bombo" se lo has dado tú por no aceptar esa opinión sustentada en hechos fácilmente constatables.

Y sí, estoy hablando contigo porque no te meto en aquel saco. No tengo motivos. Hoy discrepo contigo, y no es la primera vez. Mañana el hacedor dirá. Ningún problema con ello. Ni el más ínfimo.