Las especificaciones de los altavoces (prácticamente no se salva ninguna marca o modelo...) en relación a su rango de frecuencia de trabajo, son todas totalmente exageradas e irreales especialmente en lo que concierne a las bajas frecuencias. La gran mayoría de ellas dan medidas de frecuncias bajas de 40, 30 e incluso 20 hz que son totalmente inalcanzables por ninguno de ellos con un mínimo de solvencia. Todo aquello que sea igual o inferior a 70-80hz, es muy aconsejable dejar que lo trabaje el subwoofer. En cuanto a las frecuencias altas, pasa tres cuarto de lo mismo... sin una buena amplificación (y estaríamos hablando de etapas de potencia dedicadas...), sumado a la propia construcción y limitación física del altavoz (y de nuestro propio oido), olvídate de las referencias dadas por las marcas de altavoces.
Por tanto, los calibradores automáticos de los propios amplificadores son una buna guía como referencia, pero hay que saber que ni son exactas ni hacen milagros (eso sí, sirven de buena ayuda para dejar la instalación de forma, digamos, aceptable).