Salvo Die Austreibung, que se trata de un mediometraje al parecer perdido, he visto las otras 4 (de hecho, 3 las tengo en DVD, me falta Der brennende Acker, que vi en su día en la Filmoteca). La de Dreyer tiene la curiosidad de estar protagonizada por un Walter Slezak delgado, joven y atractivo.
De las de Murnau, Der brennende Acker la recuerdo como un melodrama de lujo, muy bien ambientado. En cambio, Die Finanzen des Grossherzogs es una comedia un tanto tontorrona, la más floja de las que he visto del director.