No creo que tenga tanta suerte que a la primera sea la vencida pero quién sabe...

Lo cierto es que si me enterrasen como al faraón que encarnaba el gran Jack Hawkins en TIERRA DE FARAONES (1955), de Howard Hawks, con todos mis tesoros (léase cómics, libros y películas) no necesitaría una sino las tres pirámides de Egipto para que me cupiese todo.

Espero no perder el hilo del hilo ahora que empezamos con los títulos mayores de su director (o sea, EL DR. MABUSE, aunque LA MUERTE CANSADA se puede situar perfectamente en el mismo grupo de cabeza) pero me esperan días de vino y rosas, quiero decir de estrés, porque estoy decidido a dejar el hogar materno (que me ha cobijado desde hace 55 años... ) tan pronto como empiece el verano.

Y no precisamente del '42...