De inicio, resulta extraño que Pauline, aún estando gravemente herida (es apuñalada en el estómago con una botella rota), sea capaz de aniquilar a los dos psicópatas, sobre todo al gigante.
Posteriormente cuando uno ve como Pauline y Vera viven en la misma casa donde fueron atacadas y que concretamente, Vera está encerrada en el sótano, lo primero que uno piensa es que carece de sentido alguno, que nadie en su sano juicio optaría por quedarse a vivir en la casa donde fueron salvajemente atacadas y menos aún, encerraría a una de sus hijas en el sótano. En caso de padecer algún problema mental, lo lógico sería que estuviera alojada en una institución mental, no encerrada como un animal salvaje.
También se ven pequeños avisos y mensajes, como cuando Beth sólo oye la voz de Vera cuando habla por teléfono (y no la de su madre) y ella le dice constantemente a Beth: "no me abandones, no me dejes sola", "¿oyes el sonido? ya están aquí" o los mensajes escritos que rezan "ayúdame".
Finalmente escenas extrañas como cuando Vera está atada con cadenas en la habitación superior mientras se rompe los dedos, quedan totalmente justificadas cuando se descubre el "pastel": todo es fruto de la imaginación de Beth, la cual fruto del trauma de ver a su madre asesinada y ser secuestrada, se inventó una realidad paralela en su imaginación para escapar de dicho dolor (sin poder evitar, que algún acontecimiento real se colara en su mundo imaginario a modo de sutil referencia, como la tortura que aplica el hombre gigante a sus muñecas, rompiéndoles los dedos), lo cuál encaja a la perfección en la descripción que aportó su hermana al comienzo de la película: que su obsesión por escribir se debía a su necesidad de crear historias que la aislaran de la vida real, porque era incapaz de afrontar sus miedos y temores. Miedos y temores que acaba superando en el clímax cuando decide volver a la realidad para ayudar y salvar a Vera, enfrentándose valiente y fieramente a sus captores.
Esto implica a su vez que las chicas llevan desaparecidas un corto periodo de tiempo (de ahí que no se hubiera denunciado aún su desaparición) y cuando se encuentran con la policía y éstos informan de su hallazgo, rápidamente les notifican que la mujer de la gasolinera las había visto viajar hacia la casa de su tía, por tanto ya saben a donde dirigirse. Y finalmente gracias a esa información, aunque los dos agentes iniciales son asesinados, llegan refuerzos a la casa. Y puede parecer una tontería, pero se agradece cuando en una película se realiza un ejercicio de coherencia y el cuerpo policial no parece integrado por inútiles (como detalle, por una vez, el policía de turno no vacila y ante el menor movimiento y amenaza, acribilla al psicópata).