En mi caso es un intangible de "modernidad", con la perilla y el pendiente, pero es certero históricamente. Los pendientes, coronas, diademas, tiaras, broches y demás denotaban estatus y prestigio en la Roma imperial.
Además Denzel interpreta a Macrino, que era de origen norteafricano, documentado en multitud de legajos, y que por lo que he leído tiene una historia más interesante que la que nos va a presentar esta secuela tardía, no tengo dudas.