Lo de Emmerich era una explotation de Parque Jurásico por el sistema paleto de "lo mismo pero más grande". Una vulgarización del mito de Godzilla inferior incluso a las propias infamias perpetradas por los japoneses, que ya es decir. Las películas japonesas tienen a su favor, al menos, el factor del exotismo cultural para hacerlas soportables. Y me refiero a cosas como "Final Wars", una tontería inmensa como la de Emmerich pero al menos más excesiva y grotesca en todo.

Esta, solo por los trailers, muestra un respeto y una seriedad a la hora de tratar el concepto de Godzi que supera al de los propios nipones, algo sorprendente. Es curioso como los tiempos de crisis contribuyen a una mejora cualitativa en las pelis de terror y catástrofes de fuerte contenido simbólico... Este Godzilla, algo quizás impensable en los 90, promete tomarse en serio la idea de una fuerza imparable e ignota que amenaza a una sociedad inane. Y que además es un lagarto gigante, claro.