Magnífico actor, con una carrera ejemplar, que tira de espaldas y poseedor de una de las voces más poderosas e identificables del cine.

Como muchos de vosotros, mi primer recuerdo del actor está asociado con su inolvidable Drácula, cuya imponente presencia bastaba para producir terror.

Intervino en grandes películas, como la inolvidable La vida privada de Sherlock Holmes, de Billy Wilder (interpretando a Mycroft Holmes) y lo ha dado todo hasta el final.

Sus trabajos junto a directores como Tim Burton, George Lucas o Peter Jackson, volvieron a situarle en lo más alto y, lo que mejor de todo es que no solo consiguieron colmar de satisfacción a sus antiguos seguidores, sino que se ganó a toda una nueva generación de acólitos (algo poco más que increíble en nuestros días).

Demasiados papeles por recordar, muchos por (re)descubrir, sir Christopher Lee nos ha dejado, su legado es eterno.

Descanse en paz.