Estamos acostumbrados a multitud de sagas que revientan taquillas utilizando el mismo formato de varias entregas. De hecho es el mismo público el que está preguntando cuando estrenan la siguiente parte de esta o aquella película antes siquiera de ver la anterior.
El fracaso de esto esta en el género, que ya no interesa al público, y que Costner ya no es la megaestrella que era a principios de los 90, de hecho ya debe haber muchísima gente de menos de 40 años que no saben quien es.