Que yo sepa en EL SUEÑO ETERNO lo único que no se llega a explicitar es el asesinato del chófer de la familia.

El director, Howard Hawks, lo consultó con el propio autor de la novela, Raymond Chandler, y este tampoco lo sabía.

Y en eso quedó la cosa.

Y que conste que en la escritura del guion intervino el futuro premio novel William Faulkner.