Christopher Nolan dirige seguramente su película más ambiciosa, una película que, en estos momentos, sólo una persona con su gran poder para rodar lo que le apetezca puede realizar.
Interestelar es una película ambiciosa, emocional, sorprendente, a veces reflexiva, pero en varios momentos también es todo lo contrario.
Y es que aunque el director se esfuerce en explicar todo para que no nos perdamos nada (una de sus señas de identidad), a veces Nolan se mete en terrenos farragosos difíciles de tragar para legos en ciertas materias científicas como la gran mayoría de los mortales, que sólo podemos dejarnos llevar por lo que está ocurriendo en pantalla sin hacernos demasiadas preguntas. Aunque con esto no quiero decir que no se entienda la película y lo que ocurre en ella, de hecho su mensaje subyacente en realidad es bastante sencillo.
Visualmente tiene momentos de gran belleza, aunque a veces da la impresión de que Nolan hecha el freno. Tiene una gran fotografía (aunque sigo prefiriendo a Wally Pfister) y unas gradísimas actuaciones, sobre todo por parte de Matthew McConaughey y de Jessica Chastain.
La única actuación que creo que flojea un poco es la de Anne Hathaway. Y a Michael Caine le he visto sin la energía de sus anteriores calaboraciones con Nolan.
La banda sonora de Hans Zimmer que acompañan al metraje está bastante bien y a veces es incluso sorprendente, en cuanto a lo arriesgado de su propuesta, aunque sale bien parado.
En definitiva, Interestellar es una buena película, aunque algo irregular, una película que recomiendo, pero que no es para todo tipo de público.