Vista en el Phenomena en V.O, Dolby Atmos.
Este mismo fin de semana estuve revisando la miniserie del 90 y al ver ayer la primera escena -la del barquito de papel- calcada a la de hace 27 años (salvo que en aquella nos colaron un día de lluvia mientras el cielo estaba soleado, aunque casi que es la única tara tipo cutre de aquella producción) pensaba en lo extraño de estos remakes. Lo que siempre decimos. Se supone que la idea es tomar una idea que funcionó hace tiempo y presentarla a las nuevas generaciones (tan entrenadas en degustar copias que lo deben ver como algo normal) pero qué haces para ofrecer algo nuevo o, por lo menos, mejorar lo que se hizo antes?
Digo esto porque esta nueva It entra bastante bien, se intuye gente detrás, cinéfilos, que tratan de actualizar los clásicos tratando de ofrecer algo más contundente, más trabajado. A veces sale rana (como en los remakes frustrados de Bay y cía con Friday the 13th y Nightmare on Elm Sreet), a veces sale bien pero por definición no supera la anterior por ser aquella la original (el remake de Halloween, incluso, saliéndonos del género, la nueva Karat Kid) y pocas veces logras sacar oro de una idea, de un producto ya parido (aquí me tengo que ir a la TV y citar Battlestar Galactica).
Diría que It entra en el segundo grupo. Está bien, cumple con aquello del cinéfilo que se hace mayor, guionista, director y productor (o todo) y quiere homenajear aquello que le gustó hace años pero añadiendo todo lo que -cree- le faltaba. Y eso mola. Dudo que mis directores favoritos quisieran hacer esto pero los que lo hacen, me parece bien y salen algunas actualizaciones decentes. Como esta. Pero al final, con esa intención de mejorar, se altera la receta que hizo a la precedente algo especial. Algo digno de remakear.
Ese es mi problema aquí. Esta It quiere ofrecer un Pennywise más terrorífico, y lo logra. Quiere cascarnos escenas de estas que queremos ver en una película de terror, y lo logra. Casi que logra que veamos que la novela de King daba para una mejor película. Y sobre todo está muy lejos de las cotas medias (no digo ya las bajas) del slasher ochentero.
Pero es una fotocopia y eso ya me supone hablar con la sombra de la precedente.
Dicho esto, me gusta que en buena parte vaya a saco como película de terror convencional en sus escenas de terror. Algo que me gustó, y mucho, es que los monstruos/miedos que presentan ante los chavales, llegan a correr tras ellos. Porque el tiburón de Jaws o el Alien que perseguía a Ripley daban miedo pero a parte eran criaturas letales. Pero hay miedos que una vez superada la imagen inicial, qué te van a hacer? Es señora deformada o el tipo sin cabeza, qué pueden hacernos? Pero n se estado de pánico, los niños corren (joder, y nosotros correríamos) y ver como han filmado eso como una persecución, que ese tipo sin cabeza va a por ti, eso me ha gustado, porque incide en el terror primario del niño que se ve metido en ese momento.
Me ha gustado también el humor de los chavales (algo que ya vimos en otra adaptación de King, Stand By Me, o en los Goonies, incluso los chavales de Jaws 2), en especial la velocidad de las bromas durante las charlas, con coñas a veces un poco animales pero vacías de intención real.A todo esto me refiero a la V.O., esta es de aquellas que en el doblaje puede haber un poco de destrozo, y más siendo niños. En el caso de Richie, Finn Wolfhard (Mike en Stranger Things), toda su interpretación está en como suelta sus frases.
A todo esto, en la doblada, cómo han solucionado las menciones a las canciones de New Kids on the Block?
Además hay cierta normalidad en introducir ciertos momentos de sutil descarga sexo-emocional que, por reales, me han dado hasta buen rollo: cuando Beverlly y la chica de la farmacia firman en al libro de Ben y en el brazo de Eddie, no sólo ellos están un poco excitados ante ese momento, sino que ahí el director se asegura de que Bev y la otra chica apuntalen su momento de toma, te voy a poner un poco contento.
Y lo mismo, pero por el tono certero de lo que pretenden transmitir, en la enfermiza madre de Eddie y sobre todo con el padre de Beverlly. Hasta el punto de la pura incomodidad aunque nunca se pasen de la ralla o, mejor dicho, de la calificación que asegure mejor taquilla.
No me ha convencido Jack Dylan Grazer como Eddie (el hipocondríaco). No sé si es el chaval o la dirección pero parece un adulto encerrado en el cuerpo de un niño. Es de esa forma de interpretar tan intensa que me saca de la película. En general, además, It apuesta por ese tipo de chavales que hablan como adultos (pese a las coñas), ordenada y dramáticamente, algo que es tan irreal (si, tanto) como el propio Pennywise. En la famosa y actual 13 Reasons Why ocurre lo mismo. Pero no en Stranger Things: o sí, pero más disimulado, mejor adaptado.
Siguiendo con el casting, veo en la wiki que Sophia Lillis (Beverly Marsh) tiene la edad que toca pero es que la chica está un poco-bastant más desarrollada que los chavales y el contraste con ellos es demasiado (especialmente con Ben) y además, en un intento de naturalizar esos castings, han elegido a una chica y una apareciencia teóricamente algo emo, distinta y demás pero sigue siendo muy guapa, según como no cuela metida en el club de los losers. En ese caso la Beverlly del It de 1990 gana por plausible.
De las resoluciones a mi me habría gustado un poco de licencia y que, como momento de catarsis, de que todo eso es peligroso de verdad. Y lo del beso, joder... Quiero entender que el asunto es que Beverlly necesita algo de vida para salir de ese estado. Una hostia hubiese sido un buen momento cómico cuando temes que te lancen la cursilada del siglo. Pero no, te la lanzan.Spoiler:
La secuela imagino será la parte de los adultos ambientada en 2016.