Vamos a ver, no radicalicemos. Lo cierto es que a la gente que paga religiosamente su SS, le toca la moral que cualquiera pueda beneficiarse de ella sin aportar nada, o incluso cuando puede tratarse de delincuentes como los que nos ocupa. Es humano.
Y lo sé bien por que me tocó mucho las narices que me pusieran mil pegas para atender a mi hijo, por que habíamos perdido su tarjeta sanitaria. Cuando en la fila de al lado, montones de inmigrantes pasaban simplemente con dar su nombre. No niego sus derechos, reclamo los míos.
Pero estamos entrando en terreno resbaladizo...
Manu1oo1