
Iniciado por
Frank Zito
No he visto el documental, pero puedo suponer que se pueden establecer puntos de contacto, como buena hija (la peli) del espíritu contestario que inundó mucho del cine de los 70, incluido el comercial, aún con coletazos en los primeros 80: la mirada a los poderes públicos (políticos, económicos) y la propia visión del futuro de la sociedad occidental, de rasgos negativos (eso sin contar que, por el metraje original, la intención del director era potenciar aún más el aspecto social y político, mientras en la peli resultante se equilibra más con el producto de género: thriller/ terror). Añadamos la simpatía ecologista y hacia los indios nativos.
Eso si, hay que hacer notar una cierta ambigüedad y mala uva (el final tiene su miga; el destino de algún personaje), y pensamiento nihilista "subterráneo" que quizá ya no casa tan bien con el espíritu Woodstock (no sé si con el documental). En todo caso, la desesperanza 80s atrapa a la peli.