Entonces la primera trilogía es ya directamente una saga de películas rodadas en un ToySRus, digo yo.Cita:
Iniciado por HarlockBCN
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Entonces la primera trilogía es ya directamente una saga de películas rodadas en un ToySRus, digo yo.Cita:
Iniciado por HarlockBCN
Sencillamente IRREPLICABLE. Más verdad que un santo.Cita:
Los efectos digitales son una herramienta que se puede usar bien, regular o mal... No tienen nada que ver conque el cine actual tenga más o menos magia... Se puede crear la misma magia usando un ordenador que animando a mano una figura articulada, y tiene tanto mérito hacer esto último, como el que cientos de diseñadores infográficos se pasen miles de horas CREANDO las escenas digitales de las películas... Porque parece que el arte sólo es arte cuando un tío se mancha las manos, y por lo visto los gráficos y animaciones por ordenador se generan mágicamente, pulsando una tecla...
Salta a la vista. Naomi ha demostrado superar a Kidman constantemente.Cita:
Lo siento Harleyquinn pero la Naomi le pega mil vueltas a su amiga Kidman
Saludos
No, yo creo que este tipo de criticas las hacen los consumidores de articulos del Toys R Us, mas bien. (de la seccion de bebes, mejor)Cita:
Iniciado por Rafalet
Juguetes la mayoría que se pueden ver y tocar, totalmente de acuerdo :DCita:
Iniciado por Rafalet
Es que cuando veo imágenes en los Ci,FNAC de la nueva trilogía la verdad veo más eso, una peli de animación que una peli de actores. Está más cerca de un Roger Rabbit que de cualquier SW anterior. P q no lo hizo to digital a lo Final Fantasy? Carajo... :P.
Cómo me cuesta no meterme con la nueva trilogía, pero es que... CONTENCIÓN-MODE ACTIVADO :D
Mil perdones self, dejo de "chatear" ;)
Venga desvirtuemos como siempre... :apaleao
Es que de verdad no sé que más hacer, ¿nos pasamos ahora en este post a hablar también de los muñequitos de SW y de lo malas que son las precuelas? Si todo el mundo hiciera lo mismo y pusiera un post desvirtuador este post tendría más de 4000 post de paja, por favor ser un poco de solidarios con el resto del foro que no quiere un foro-chat. Es que de verdad ya no sé como deciroslo...
Un saludo.
Tranquilo hombre, Self, que tampoco creo que sea para tanto este mini-pique friki-"CGI"ero (los palabros que me invento cagondiez) y que llegue a desvirtuar el post. Si no no hubiese dicho nada en un principio.
;)
Si el tema no es ese, el CGI forma parte de la película y está claro que es tema de debate. Pero que levante la mano quien no piense tras los últimos post que se iban a llenar 3 páginas de SW, y es que el amigo Lucas despierta pasiones...
No me voy a extender en hacer una extensa crítica que luego casi nadie lea. Lo resumo en que ayer pasé tres horas de las más entretenidas de mi vida en un cine. La peli me pareció impresionante. Y es verdad que hay mucho efectos que cantan bastante, sobre todo al principio de llegar a la isla, pero bueno, tampoco es que ahora mismo cualquier cosa pueda hacerse perfecta . Despúés de la lucha con los tiranosaurios, hubiera aplaudido de buena gana. Yen la secuencia de los insectos gigantes es difícil pasarlo peor.
Vamos, que cuento los días para volver a verla.
Dos más la película es para la Universal y no para la RKo y cuando piensan en una actriz se menciona a Fay (Fay Wray) pero se dice que no puede porque tiene otra película con la RKo, XDCita:
Iniciado por spinner 44
:palmasCita:
La existencia de criaturas gigantes es una premisa de la película. Es un punto de partida que se acepta y a partir de ahi se espera que el resto sea coherente con ello. Por tanto no es de extrañar que alguno se asombre con el irrompible hielo, aunque no es mi caso ya que no le doy mayor importancia a esa licencia.
A ver cuando nos enteramos que el cine fantástico tiene dos componentes: real e imaginaria (a + bi), que conviven paralelamente. Kong parte de lo imaginario; el hielo es real. Una cosa es cine fantástico, y otra cine increíble. No la he visto aún, pero esos detalles los perdono si existe un importante aporte de creación y arte. Igual que le perdono a la original (que ni el viento la toque :amor ) la vertical y bestial caída de la pareja al mar preñado de riscos, o que el Empire State no se desmorone por una sobrecarga tan considerable como la de Kong en su cúpula.
PD: Por cierto, la del 76 no era un tipo metido en un pijama de mono; era el propio Rick Baker. No obstante, yo también me quedo con la del 33 sin dudarlo un segundo.
Estoy de acuerdo en que le ha vencido la soberbia, para mí el despido de Shore es muestra de esa soberbia.Cita:
Iniciado por Bela Karloff
A mí me recuerda un poco como cuando decían que la de Bakshi era mejor precisamente por el amor que tenían a esa versión :DCita:
Iniciado por Liberty
Lo suscribo, la mejor actriz austrialiana La Naomi, aunque nacida en Inglaterra, y después me quedo con Cate Blanchett, halaCita:
Iniciado por RogerKint
Joder como vamos de sobradetes, no? Guardaos un poco de respeto que si a uno las precuelas le parecen una mierda por el abuso de los efectos digitales no es ni mejor ni peor persona, coño.Cita:
No, yo creo que este tipo de criticas las hacen los consumidores de articulos del Toys R Us, mas bien. (de la seccion de bebes, mejor)
Davo
trankilos en el 2040 haran una version donde el hielo bajo los pies de king kong se rompa pero al caer al agua helada le saldran branquias mutantes y podra respirar prefiriendose quedar alli dado el alto grado de la contaminacion atmosferica y logicamente se ambientara en el siglo 20 donde todavia quedaban ballenas vivas para que king kong pueda tener en las profundidades una pelea a vida o muerte contra ese ser prehistorico mutante ya solo recordado por los mas viejos del lugar.la tia pos tampoco tendra problema bajo el agua porque el mono sera necrofilo y disfrutara con un enano del cadaver de la chica.jejejeje en fin a ver si puedo ver la peli que le tengo ganas.
¿y qué me decis de [spoiler:23047af68c] de la cara de Kong cuando está siendo capturado en la isla y mientras que está siendo aturdido por las botellas, las lanzas y demás.... mira a Ann. Dios, que cara de tristeza. Ahí se me encogió el corazón :bigcry ; o cuando se toca el pecho en el Empire. Genial, me enterneció lo que hace ahí Kong haciendo el gesto que le había visto hacer a Ann en su cueva. [/spoiler:23047af68c]
Bela, creo que te has liado un poco. En la del 33 no aparece eso de los fotógrafos en el pecho de Kong. Eso es en la de Guillermin. Es más, en la de Schoedsack aparece la policía apartando a la gente en plan cordón. Mirátelo bien.
Dos críticas antagonistas de Digerido por:
Cita:
KING KONG
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Digerido por SENSILLO
VUELVE EL MONO DE BILBAO. Y con él, la historia de zoofilia más famosa del cine. Muy contento se habrá quedado Peter Jackson, quien tenía mucho interés en hacer este remake que, realmente, no aporta nada nuevo.
¿Cómo se puede entender que esta revisión duplique la duración del original sin contar absolutamente nada nuevo? Peter Jackson no ha alargado la historia del gorila gigante, sino que se ha limitado a estirarla como los chicles que anuncian en la tele. Así que, muy a pesar de su entusiasmo e ilusión, la empresa me parece bastante innecesaria dentro de una cartelera superpoblada. Con esto no quiero aconsejar que se guarden el dinero de la entrada e inviertan ese tiempo en otra cosa de más provecho como por ejemplo sacarse una ingeniería o dos. Pero tampoco quiero decir lo contrario
USA, Nueva Zelanda, 2005. T.O. King Kong
Director: Peter Jackson , Guión: Fran Walsh, Philippa Boyens, Duración:187min, Reparto: Naomi Watts, Jack Black, Adrien Brody, Andy Serkis, Jamie Bell
Jackson deja buena constancia de sus virtudes y sus defectos tras la cámara, que para ello no anda falto de tiempo. Lo mejor de sí mismo lo emplea en recrear con fidelidad el espíritu mágico y aventurero de la vieja película en blanco y negro. Evoca recuerdos de otros tiempos. Las películas de Tarzán, por ejemplo, donde la función de los salvajes era comerse a los misioneros. Desde hace mucho tiempo ya solo vemos a los misioneros matando nativos. Sin embargo, le pierde en demasiadas ocasiones una tendencia a la redundancia que termina por empachar.
En atención a los lectores que se hayan incorporado recientemente a la civilización occidental esbozaré un breve resumen. “King Kong” cuenta la historia de un ambicioso realizador de cine que parte a una isla perdida, último reducto del misterio en un mundo que empieza a ser ya demasiado conocido, con el fin de rodar una película en tan exótico paraje. La isla resulta albergar una extraña fauna salvaje que parece salida de la imaginación de un publicista de cola cao con mala leche. En la cúspide de una pirámide alimentaria voraz se encuentra orgulloso Kong, un gorila gigante, y al cineasta se le ocurre hacer fortuna llevándolo a Nueva York. Como se podrán imaginar, no hay nadie con autoridad ni sensatez que se lo impida y ocurre lo que tiene que ocurrir.
La descripción y relaciones entre los personajes están ahora más detallados en esta nueva versión. Especialmente en lo que respecta al típico triángulo amoroso chica-chico-gorila gigante, que era una cuestión en la que la versión del 33, más ágil, pasaba de puntillas.
Otro punto en el que intenta ponerse al día es, obviamente, en la cuestión de los efectos especiales. Impresionantes los de aquella, también lo son los de ésta. Sin embargo, también aquí nos encontramos con una de cal y otra de arena. Mientras King Kong consigue llenar toda la pantalla, en todos los sentidos, hay sin embargo alguna escena en que el apartado de efectos especiales decepciona dentro de lo que se espera en una ambiciosa producción de este tipo. Me refiero, concretamente, a la escena del San Fermín del Cretáceo.
En resumen, podemos asegurar que en “King Kong” encontraremos buenos momentos, perdidos entre otros no tan buenos. Se hubiera agradecido tanta energía empleada en un fin más novedoso. Pero quienes no tengan ganas de rebuscar en la videoteca pueden aprovechar para dejarse arrastrar por el entusiasmo cinéfilo de Peter Jackson.
Recomendada para las que buscan a un hombre de los que dejan huella
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Digerido por BRONTE
PUES PARECE QUE ESTE PETER JACKSON sabe dirigir. Hasta me atrevería a decir que puede que en él resida la esperanza del cine-espectáculo con mayúsculas. En este King-Kong, no se nos ofrece más que un remake bastante fiel a la primera película de 1933. Pero qué remake. No voy a decir que mejora la cinta original, porque el celuloide de los años 30 tiene una magia insuperable. Pero desde luego no se queda atrás. Para ello retoma la historia en el momento en que fue concebida y llena sus fotogramas de art-decó, ya patente desde los títulos de crédito tan reminiscentes a la RKO.
No es ésta una película a la que se le puedan reprochar muchas cosas. En sus dos aspectos más básicos, historia y realización, alcanza cotas de excelencia. Es uno de esos ejemplos en los que los efectos especiales tienen su muy justificada razón de ser. Es verdad que la parte en que nuestra expedición se aventura en la Isla de la Calavera, puede hacerse algo larga debido a la cantidad de escenas de acción que en ella han sido incluidas. Desde dinosaurios hasta ciempiés gigantes, aquí no falta ningún tipo de bicho repugnante. De hecho, se puede afirmar taxativamente que en este filme hay evidentes homenajes a muchas películas de aventuras de la historia, y algunas no tan antiguas. Y si bien es verdad que llega un momento en que parece que los ataques varios y la acción nunca van a tener fin, lo cierto es que es tal la maestría en la planificación de las imágenes, de tal perfección algunas texturas, y sobre todo, de tanta imaginación lo que pasa en cada minuto de la proyección, aprovechando al máximo las posibilidades del "paisaje", que uno no puede dejar de asombrarse de que haya gente en el planeta con tanta creatividad visual.
La infografía en esta película es sin lugar a dudas uno de sus reclamos más evidentes. Y el equipo de Peter Jackson ha sabido crear unos efectos contundentes y espectaculares. Quizás la cinética se resienta en algunos momentos, sobre todo debido al gran riesgo que han asumido los creadores de este "King-kong". Los momentos en que el gorila gigante corre con la bella rubia atrapada en su mano, puede que no consigan el efecto de manera magistral, pero al mismo tiempo, eso nos retrotrae a la primigenia versión con lo rudimentario de sus f/x. Y se agradece ese halo de "falsedad" que ha querido conservar esta nueva versión. Ese aura de cartón-piedra que hacía todas aquellas películas tan entrañables.
El trabajo informático es especialmente brillante, sobresaliente en el caso del protagonista de la película. Puede que el Rey Kong sea el personaje con más humanidad de todo el metraje. Su mirada, sus expresiones, aun estando dentro de repertorio animal están llenas de significado, y tienen un realismo casi aterrador. Aterrador por lo conseguido de la técnica, y por lo estupendo de la captación de los estados de animo. Y por eso mismo tiene poco de aterrador en cuanto al monstruo, porque este gorila de ocho metros, aparece cercano y familiar desde el primer momento. Pero no es en los cuerpos en el único sitio donde se nota el ordenador. Los propios decorados, guiados por una estupenda dirección artística son memorables y contribuyen de manera notable a crear los espacios emocionales del filme. Lo que se ve en el fondo de cada escena, por decirlo de alguna manera, habla también de lo que está pasando en esa escena, y en plus fantástico, nos retrotrae en infinitos homenajes a cientos de películas que hemos visto previamente.
La fotografía, el color de la película... hacía tiempo que no se veía un color tan bonito en un filme. Saturado, recuerda un tanto a las películas coloreadas o a ciertos filmes de los años 30. La manera en que todo está iluminado en "King Kong", ayuda a construir un mundo "irreal", casi mítico, tanto en los espacios naturales como en la gran ciudad. Si es verdad que hemos visto Nueva York muchas veces en el cine, también es verdad que pocas veces como lo podremos ver en esta cinta. Los planos aéreos dejando adivinar Queens o Brooklyn al fondo, son magníficos. Jackson ha fotografíado el Empire State con un respecto y reverencia inusitados. Y es verdad que ésta ya era una imagen icónica existente en la original. El Rey de la Creación sobre el más importante edificio del mundo.
Detrás de todas las carreras, persecuciones y planos difíciles lo que queda es una historia mítica. Revisión del cuento de Madame Beaumont, la historia de King Kong aparece como el descubrimiento de la ternura interior por encima de las circunstancias exteriores. Pero también, y ahí está el grandísimo acierto de Jackson respetando este espíritu, es una fábula cruel en la que el ser humano aparece retratado como inferior al mundo animal. En "King Kong" no hay diferencia entre los salvajes de la Isla de la Calavera y el refinado público de Times Square. Seres deshumanizados incapaces de competir con el gorila cuando éste contempla a la bella Ann Darrow. Dos seres desplazados de/en su mundo, capaces de compartir la belleza de una puesta de sol.
Si algo hay reseñable en esta película, más allá de los efectos especiales, es el espléndido pulso a la hora de ir desarrollando los personajes y las relaciones entre los mismos. Incluso el bonísimo casting. Jack Black, un actor sobresaliente, es capaz de ir conviertiendo su hilarante personaje en un ser repugnante, depositario de lo más deleznable del showbiz. Adrien Brody, vuelve a prestar su difícil físico para un caracter vulnerable que se crece cuando realmente hace falta. Naomi Watts, con no ser una gran actriz, acertada aunque repetitiva en sus gestos, aprovecha la fascinación que por ella debe de sentir el director de fotografía y no pierde comba para aparecer guapísima. Sus dos historias de amor están desarrolladas con pulso y candidez. Su relación con el Rey Kong es profundamente emotiva (aunque Jackson se ha guardado mucho de caer en la sensiblería), haciendo hincapié en las analogías entre ambos personajes y sin duda alguna más de uno echará una lagrimita acabando ya las tres horas y veinte. Metraje del todo innecesario, pero que se perdona por el talento exhibido. Una sola pega aparte de la excesiva duración: la relación entre Evan Parker y Jamie Bell, también conocido como Billy Elliot, que entiendo da profundidad a la trama, pero sin venir mucho a cuento, sinceramente. Parabienes para Andy Serkis, que no sólo dio vida al Gollum, sino que ahora ha calcado (literalmente) a Kong, y ojo a Thomas Kretschmann, el capitán del navío que parece que tiene cierta habilidad para robar escenas sin mucho esfuerzo.
Un gran espectáculo. Una gran película. Retoma y nos retrotrae al espíritu de otras grandes películas de aventuras. Recomendada para gente mona
a mi lo que me dejo helado es cuando kong muere.... :((
La vi el domingo. Lo recuerdo perfectamente.Cita:
Iniciado por Diodati
La disparidad de críticas en este tipo de producciones a veces raya los simplemente sospechoso. No se sabe si el crítico en cuestión se deja llevar por la vorágine comercial y forma parte del capítulo presupuestario dedicado al capítulo publicitario, o si realmente se evalúa con la suficiente objetividad. O quizá Jackson atrae el odio, envidia o vaya usted a saber el qué, desde su Señor de los anillos, de estos críticos que con tres frases construyen un foso aséptico donde arrojar al neozelandés.
La disparidad de críticas siempre existe, con cualquier autor diríase y más en este tipo de productos. Supongo que a quien no les gusta simplemente les puede parecer un mediocre, nada más...Cita:
Iniciado por ziggys
Me has hecho dudar y me acabo de poner el final. La verdad es que creo que te lías con la de Guillermin. Pásatela de nuevo, please. Es que no se ve ningún periodista ni ninguna cámara de fotos. Eso lo recuerdo de la otra. Lo digo, no vaya a reflejarse por escrito en otro lugar más sagrado. :))Cita:
La vi el domingo. Lo recuerdo perfectamente.
Me suena más lo de Diodati, Bela. Hostia, que alguien resuelva esta duda que va a imprenta...Cita:
Iniciado por Diodati
No hay peligro...
Tranquis, coleguis...
A mí me ha decepcionado, no por los FX que están geniales, sino porque tiene fallos de ritmo bastante gordos. A tramos se hace muy leeeeeeeeenta. Le sobra metraje.
Me uno a los decepcionados: le sobra metraje y exceso en las escenas de acción. Pero en mi opinión los efectos especiales también dejan mucho que desear. Creo que se comprometieron a tenerla lista en esta fecha y las prisas les han podido.
A alguno más le ha decepcionado que vaya casi siempre a 4 patas en vez de a 2 como en la original?
de todas-todasy por supuestísimoCita:
la Naomi :amor le pega mil vueltas a la Kidman
la kara de la kilman no deja de ser impenetrable, fria y distante por muchas gañotas ke haga, y Naomi enternece kon esa boka entreavierta asomando los piños, al más pintado kuando mira la kámara...por favor, ni punto de komparación... :pensando
A todos los que critican que la peli es muy larga y un chicle estirado: ¿acaso es que por culpa de eso habeis llegado tarde a alguna cita o tenias algo importante que hacer después del cine?
Aquí estamos hablando de cine espectaculo y es el te ofrezco más (más brontosaurios, más kilo de mono, más todo) por el mismo precio que te cuesta la peli de la multisala de al lado.
Y en este nivel, si a mi me gusta una peli y estoy disfrutando pues que puede durar diez horas si quiere oiga.
Y si no me gusta pues se me va a hacer larga aunque dure sólo quince minutos.
Creo que Jackson esta dignificando este tipo de cine ya que, aunque no lo consiga siempre, se nota que busca la excelencia en todos los aspectos de sus últimos trabajos. Y seguro que la industria ni tan sólo le pide eso.
por BgdPhiladelphia:
Cita:
El otro día, viendo King Kong, una de las cosas que más me sorprendieron fue ver Nueva York atacado y sumido en el caos, no por el crack del 29 ni por el crimen, sino por un factor externo, en una película de 1933.
No es que no lo supiera, pero nunca me había dado cuenta, y desde entonces tengo la duda de si es realmente esta la primera película en la que se produce un ataque a Nueva York o existe alguna anterior.
Ahí dejo la duda, supongo que los más cinéfilos sabrán responder con exactitud.
Mmm, si he abierto otro post es porque se trata de una duda sobre una película diferente a la que ha hecho Jackson. Pero bueno, si el moderador cree que debe ir aquí, me parece bien.
Tu lo has dicho, hablamos de CINE en este caso cine-espectáculo. En tu caso creo que más bien sería hablar de espectáculo a secas. Yo al cine le pido más que eso, por algo le llamo cine :P. No creo que yo sea el único.Cita:
Iniciado por Sosafe
¿Acaso porque una película sea destinada a las masas, que sea un superproducción en plan mega-espectáculo, que dure mucho... esto no se puede considerar cine? :! lo siento, pero tu afirmación me parece muy fuerte o te entendido mal. El 7º arte tiene muchas vertientes y los ESDLA, SW, Potters, Spiderman no son parte del cine, es CINE., como lo son las románticas, intrigas, terror...Cita:
Iniciado por HarlockBCN
Es fuerte si entiendes mi afirmación de manera contundente. En ningún momento he dicho que el cine-espectáculo no sea cine, sólo me he referido a lo que se decía en el post anterior que más que exigir cine de lo que se estaba viendo sólo se estaba exigiendo espectáculo...Cita:
Iniciado por KLopeK
Cine no es como se decía en un post anterior algo así como "si una escena de acción de 1 minuto está guapa pues la alargo 5 minutos y será igual de guapa", no, yo creo que eso no es cine. Cine es saber cuánto ha de durar cada cosa y darle un porqué a esa duración a ese ritmo de la película , a por qué me puedo pasar 30 minutos de reloj con una escena de acción y 1 con una escena profunda en la que un personaje intenta dar a conocer sus sentimientos, por poner un ejemplo.
Veo muy facilón eso de que por ser peli blockbuster no tengamos que exigirle nada. Es cuando eso pasa cuando se acaba menospreciando este tipo de cine. Y luego nos quejamos.
Yo creo que esto se va a notar de aqui poco tiempo, la gente se está cansando de tanto inflar una película con fx y acción, haciendo que ya no sepamos diferenciar un momento espectacular y lleno de emoción de otro que no lo requiere con la inevitable consecuencia de la desaparición de espectacularidad y emoción.
Saludetes
P.D: Por cierto, el foro va como el culo... Sólo informo, no es ninguna queja, que es gratis! ;)
No se trata de inflar con FX, que yo sepa los FX existen desde que el cine es cine y es parte del cine como lo es la musica, la fotografia... y po rcierto, no parece que ese momento que dices llegue pronto, porque la gente continua pagando entradas para ver ese "depreciable espectaculo" (ironia), o acaso el KK del 33 no era mas que puro espectaculo muy basado en los FX (en el 33 fue la leche), porque yo no he visto nunca a KK recitando el Hamlet de Shekespeare.
No pensaba participar en el hilo pero me ha pasado algo curioso y tengo necesidad de comentalo. Despues de ver la peli en el cine (que me ha encantado, por cierto) me puse a revisionar la vieja y me di cuenta de lo mal que la recordaba (la vi hace muchos años) y he visto cosas que no me han gustado.
Resulta, y esto lo digo por la gente que siempre mitifica lo antiguo y echa pestes de lo nuevo, que redescubri que Kong está representado como un simple monstruo, sin sentimientos y que tiene a la chica como el juguetito del momento. No existe la relación de cariño entre ambos que vemos en la nueva. Es curioso que durante años habia estado dando por hecho que esto era una de los temas centrales del film (ahí se demuestra lo mal que la recordaba).
La chica en ningun momento siente afecto por Kong e incluso participa de la exhibicion de este en Nueva York.
En la pelicula nueva todos los perfiles de los personajes estan mucho más trabajados (ver el progresivo cambio de Jack Black -en la vieja el personaje era un John Wayne todo el metraje).
Conclusión:
1.- Adoro la vieja, la tenia y la tengo por una de mis pelis preferidas. En su momento tuvo que ser un Boom.
2.- La nueva es más espectacular, el guion esta más trabajado, los personajes más desarrollados, asi como la de las relaciones entre ellos. Con ello quiero decir que el remake es SUPERA al original (aunque querais sacrificarme a una manada de lobos).
P.D.: Atencion especial a la tribu nativa. En la vieja estan topificados. Ayudan (casi "obedecen") a los blancos. Van con falditas hechas con palmeras, sus casas son como chalecitos occidentales (cuando Kong se encarama a una choza que esta construida en lo alto se ve que tienen hasta luz electrica). En la nueva todo es más crudo y creible....y como esa muchas... aunque entiendo que son cosas inherentes a las épocas en las que se hicieron y a la madurez del cine...
¿Y quién dicta "el tempo" que el director debe establecer en sus películas?Cita:
Cine es saber cuánto ha de durar cada cosa y darle un porqué a esa duración a ese ritmo de la película
Por lo que veo, también te asquearían Bergman, Kubrick, Visconti o Leone, por poner solo unos ejemplos.
Uno de los defectos que más me asquean del cine actual, es lo acelerado que es. Todo sucede muy rápido, como si se tuviera prisa para terminar pronto y no aburrir al respetable.
No, en mi caso siempre me ha gustado el cine que se tomaba su tiempo, como si de tiempo real se tratase, para sumergir al espectador en la escena y vivirla como un protagonista más.
Odio el típico sincretismo que por ejemplo emplea siempre Scott en sus producciones.
Admiro al Sr. Jackson porque, si bien la duración final estaba fijada en 150 min., decidió en último momento incluir lo que tanto le dolía sacrificar aún a pesar de ser consciente que le lloverían las siempre obligadas críticas por la duración.
Sres. Esto es todo un orgasmo visual y cinematográfico, cuya degustación sin duda requiere más de un visionado.
Considero que esta será toda una películo de culto para los cine-adictos que disfrutamos de nuestros DVDs. No dos horas, sino tres intensas y abrumadoras horas de película que jamás cansarán en sucesivos visionados.
Toda una fiesta para disfrutar del cine en su máxima expresión: ilusión, magia y espectáculo.
En definitiva solo de trata de eso, de CINE, y con mayúsculas.
Saludos
Cita:
King Kong: El retorno del Rey Jackson
[spoiler: esta reflexión crítica alude a alguna de las claves que explican el argumento de King Kong de Peter Jackson]
Uno no sabe qué pensar o decir cuando se enfrenta a un remake; opinión que se agrava: a) cuando el original proviene de una cinematografía tan alejada de la nuestra como la de los años 30, b) cuando buena parte de las imágenes y secuencias de la película homenajeada forman parte del acervo cinéfilo-cultural de la gran mayoría de los espectadores (sean o no, aficionados al séptimo Arte; con el componente de herejía/blasfemia que origina este hecho en algunos); c) cuando los objetivos e intereses que la hicieron posible nos resultan hoy tan anacrónicos. Con estas cautelas, revisar un clásico incuestionable (e insuperable) como King Kong a estas alturas del nuevo milenio no podemos más sino considerarlo una empresa arriesgada, al menos, a nivel artístico (el rendimiento comercial puede suponerse, máxime cuando el potencial mercadotécnico se rebela tan imparable), un acto de osadía de naturaleza suicida (otros, creyéndose reyes del mundo sin serlo desaparecieron de la parcela autoral aquejados de un miedo escénico incurable) impropia de tipos asentados en una industria que no perdona el fracaso ni a quienes lo promocionan.
Y es que King Kong, no deja de ser una aventura-ficción en formato celuloso con ingredientes de monster movie paleontológica, tratamiento fantasioso en el desarrollo de la acción (que muchos considerarán exagerado y/o desproporcionado), y el eterno dilema entre la Bella y la Bestia (el gran subplot del cine de fantástico) como germen de una gran historia de (des)amor. Es decir, carne de cañón para críticos y puristas, para demandantes de un Cine reflexivo, ajustado, pretencioso, o en su defecto, para nostálgicos adoradores de las siluetas clásicas incapaces de dar su brazo a torcer frente al CGI y el estruendo revienta-tímpanos. Defectos éstos que acumula el King Kong de Peter Jackson con asilvestrado orgullo y que el propio director ni se atreve ni quiere ocultar.
Para contrarrestarlo (y por fortuna), el cineasta neozelandés apuesta por ofrecernos una película pasional y vibrante, una experiencia cinematográfica de ascendencia lúcida que sabe conservar y conserva el atractivo, la esencia, el encanto de las epopeyas de aventura de toda la vida en un argumento evocador que, en palabras de uno de los propios protagonistas, conserva vínculos con El Corazón de las Tinieblas conradiano. Palabras que, de forma singularmente pretenciosa, introducirán al grupo en las fauces de una isla prehistórica donde los conflictos se resuelven en el cuerpo a cuerpo y las bestias se amanceban con plena morbosidad.
Pero ahí no se acaban los riesgos de esta singular película. En su afán de desmarcarse de la cuestionable e irregular cintas de Guillermin (precedente de ésta, también en cuanto a metraje desorbitado y que el propio Spielberg trató de emular en la todavía interesante El Mundo Perdido: el principal referente del film que hoy nos ocupa), la película de Jackson canjea los juegos sexuales, casi burdos, de la predecesora, en una serie de juegos infantiles, circenses, que requieren de una cierta empatía del espectador, su beneplácito, y que sólo funcionan a medias en tanto que Naomi Watts no es Dianne Fossey y sus movimientos se rebelan demasiado impostados para alguien que está a punto de ser devorada por un animal gigantesco, seguramente maloliente. Pero no molestan, ya digo, pues cumplen con su misión de comunicar las emociones de un animal, Kong, el Rey de la Selva, más Rey que nunca en este ecosistema preñado de hostilidad y bestias atemporales, a pesar de sus heridas físicas y sobretodo existenciales, en una cueva escavada en lo alto de una montaña guarecida por los huesos de quienes debieron ser iguales, quizá la hembra que ya no tiene, a buen seguro, la última de su especie. En los ojos de Kong, la cámara de Jackson insiste en ello constantemente, refulge el destello de una tragedia ineluctable.
Los personajes que jalonan el film cumplen sus objetivos como arquetipos, protagonistas subsidiarios de esta historia de amor tan compleja (la subtrama que más le interesa a Jackson -y a mí- y a la que más tiempo y metraje dedica). Aquí, el aventurero Driscoll (Adrien Brody) se transforma en un guionista teatral, un comediante hábil con las letras y sus servidumbres, embarcado por cuenta de un engaño en una aventura extraordinaria: la filmación de una película en las inmediaciones de una isla desconocida, y que gracias de ella, acaba convirtiéndose en un superviviente nato, en un hombre de acción idealista, en un émulo de Indiana Jones sin látigo. Tercer vértice de un triángulo amoroso saboteado por la desdicha y la inexorabilidad, el bueno de Driscoll tendrá que recorrer medio mundo, escalar más de una cima, para conseguir abrazar a quien ama y, de paso, encontrar un halito de reciprocidad.
El resto de secundarios posibilita una identificación/asociación entre los cineastas y los aventureros, y sobre las indeseables vertientes que la puesta en marcha de un proyecto audiovisual conlleva, tema espinoso éste en el que Jackson se siente más que a gusto, dando buena cuenta de los productores y de si mismo, en esa simulación a lo Orson Welles realizada por Jack Black, cuya mirada excéntrica protagoniza alguno de los mejores momentos del film (relación entre Kong y Ann Darrow excluída).
Una vez presentados los personajes, en fin, la acción se divide en tres grandes bloques conceptuales divididos en otros tantos subepígrafes que bien podríamos emparentar con la praxis aristotélica: introducción (hasta que llegan a la Isla), nudo (mientras están en la Isla), desenlace (cuando regresan a Nueva York); unidades capitulares culminadas por sendos clímax que conforman la estructura argumental del King Kong de Peter Jackson, resolviendo con proclamas clasicómanas los entuertos en que se ve imbuido por cuenta de un departamento de producción adicto a los fuegos de artificio y a la pirotecnia desmedida. En el fragmento más reprochable de este film, una camada de Brontosauros asustadizos perturba la vida y los destinos de buena parte de los aventureros, persiguiéndolos y aplastándolos por doquier en medio de una confusión propiciada por un grupo de Velocirraptores spielbergnianos. Es una secuencia menor, exhibicionista y reprochable, insertada entre otras igual de exhibicionistas pero menos reprochables que sirven para subrayar el carácter residual (pero animoso) de otra de las vertientes definitorias de este tipo de películas: su incontenible despliegue de efectos especiales; despliegue que aquí, sin embargo, cumple con la prometida labor de aunar homenajes de índole cinefílico (desde O’Brien a Harryhausen, pasando por la propia trilogía tolkiana) con una sana y vacua intrascendentalidad argumental, que rellena de impostada adrenalina digital los tiempos muertos en que Kong y Ann Darrow descansan a salvo del peligro.
Son muchas, variadas, en fin, las sensaciones satisfactorias que deja el visionado del último trabajo de Peter Jackson, al igual que su anterior trabajo (aun discutible), una alabanza a la fantasía cinematografiada repleta de f/x y personajes invencibles, valerosos o cobardes, ambiciosos o nobles que, sin embargo, sufren y se enamoran, mueren y (sobre)viven en un hábitat devastador donde, pese a todo, aún queda un resquicio para la ternura, el afecto, la aventura sin fin...
Todo esto es King Kong de Peter Jackson. Una película que vilipendiarán muchos (que no captarán su condición de historia primaria y superlativa) y les gustará a otros (los menos) y que unos pocos (alguno de estos últimos) vindicaremos con el paso de los años como la aventura apoteósica y respetuosa que siempre quiso ser. Y es.
Lo más destacado: Naomi Watts rechazando el brazo de Adrien Brody al final del segundo bloque conceptual.
Lo menos destacado: que la (supuesta) cursilería de alguna de sus escenas simplifiquen las implicaciones filo-trágicas de esta historia universal.
Calificación: 8,5
Yo critico su duración, porque se me ha hecho larga; por supuesto que si una película me gusta me da igual que dure 4 horas. Pero en este caso precisamente creo que la duración de muchas de sus escenas de acción son las que me han hecho alejarme de lo que se contaba, llegando a aburrirme en momentos.