Cita Iniciado por arcanoid Ver mensaje
Synch, siento discrepar contigo, a mi el KK de JAckson no me parece excesivo en ningun aspecto, ni en el narrativo ni en el visual.

Me parece una pelicula muy equilibrada entre la aventura y el romance, y vemos, a diferencia de KK original y el KK del 76, un "mono" protagonista casi humano, con una actuacion maravillosa, al iguan que Naomi, la ultima escena tiene mas sentimiento que too JP o peliculas similares juntas.

De hecho, la parte mas larga es la inicial, que navega entre comedia y pelicula de aventuras clasica, y para mi es una delicia estar viendo hoy dia , con un ritmo pausado pero no aburrido.

No me entiendas mal, a mi peliculas como JP o Godzila me encantan, pero creo que son otro genero totalmente distinto.
A lo mejor el tema sería si PJ quiso hacer como cuando uno amplía columnas en un Excel y aparen ahí muchos datos que a simple vista no se veían: tomar la del '33 y potenciar todos los aspectos, el cómico, la recreación de los 30 (ahí es donde la foto de Lesnie me da un punto raro, una paleta de colores curiosa pero no me va), el tema de Hollywood en los 30, el de los productores, directores y actrices, la fascinación del mundo cinéfilo-urbanita por ir a parajes remotos tropicales o selváticos a rodar, precisar a saco el tema de la tribu salvaje, convertir a Kong en un simio real cuya única diferencia con uno creíble es el tamaño, potenciar el enamoramiento de Kong, el síndrome de Estocolmo de Ann, potenciar la fauna de la isla, potenciar el contraste con la llegada de esa criatura a la moderna selva urbana de NYC...

De hecho la escena de Central Park es muy bonita, capto esa intención de PJ.

El problema es que todo eso no me va. Porque me gustan las del '33 y '76 que son esencialmente películas de monstruos, con un potente componente sentimental en la relación con su víctima, suavizado en cada entrega (el Kong del '33 sería aquí el más chungo, el del '76 casi que empieza como algo sexual y termina en tristeza (en la escena del depósito de petróleo) y enamoramiento), pero con un primer, segundo y tercer actos que adoro como historia sencilla y eficiente. Es como si Jackson hubiera querido rellenarlo todo con más y más, aprovechando todos los medios que su status le permitía en 2004-2005, y dicha potencia se comiera parte de la narrativa.

A fin de cuentas no hablamos de Michael Bay o Roland Emmerich, aquí Jackson no olvidó la faceta humana en ningún momento, sabe dirigir, cuenta una historia y se nota lo enamorado que estaba de la cinta del '33, pero si me quitas 15 minutos en NYC al principio, un poco de la fauna de la isla (está bien verlo por el CGI y demás pero ya en el cine me pareció demasiado y rallando el qué podríamos hacer aquí para meter más bestias?) y otro poco de la parte final de NYC (inclusive el ataque), creo que me gustaría bastante más.

Aunque me las sé de memoria a ver si estos días reviso las tres, apetece