Uf, hacía tiempo que una película no me hipnotizaba y absorbía de esta manera. He tenido durante toda la proyección una sonrisa de idiota que no me podía quitar, como cuando estás enamorado. Y es que sí, al acabar la película me he dado cuenta: me he enamorado de esta maravilla de película. :encanto Me vais a perdonar la cursilería (especialmente a quien no le haya gustado la película, pensará que es una imbecilidad), pero no encuentro mejores palabras para expresarme, he salido flotando del cine, totalmente embelesado, es maravilloso encontrar una obra que conecte de forma tan potente con uno, por eso es siempre una alegría, saber que ya estará contigo para siempre.
No soy proclive a emplear la expresión "obra maestra". Es muy raro que una película sea redonda del todo. La que no tiene algún bajón de ritmo tiene un actor mal escogido, o una escena mal rodada, o lo que sea. Pues qué demonios, no soy capaz de ponerle una pega a La La Land, me parece redonda, así que me voy a dar el gustazo: es una
obra maestra. :agradable
Y eso que, con tanta recomendación, tanta nominación al Oscar y demás, me estaba empezando a caer gorda, iba mal predispuesto. Pero toda resistencia ha sido inútil.
Entiendo a los detractores: la historia es sencilla (un "chico conoce chica" de toda la vida), y si uno no sintoniza con la magia de la propuesta, se le puede hacer pesada y tonta. Pero en mi caso he entrado de lleno, me ha emocionado y ha removido ciertas historias personales. A pesar de ello, puedo asegurar que eso no nubla mi juicio sobre lo puramente cinematográfico, y es que la película me parece perfecta a nivel narrativo. Ya me llamó mucho en Whiplash el sentido musical que tiene Chazelle de la dirección y el montaje. Cuando digo esto no me refiero a los momentos musicales, me refiero a que su acercamiento al cine tiene mucho que ver con la composición musical. Las escenas tienen sus crescendos, sus énfasis, sus suspensiones... Cine y música tienen mucho que ver, son dos artes que se desarrollan en el tiempo (al contrario que otras como la pintura o la escultura), y el ritmo y la composición tienen gran importancia. Chazelle es un narrador de primera, y no sólo en las escenas más espectaculares como la secuencia inicial. Incluso las pequeñas escenas, los pequeños momentos, son joyitas con detalles narrativos maravillosos.
Además de eso, la película es por supuesto un gozo para los amantes de la música y el cine, esas dos artes tan relacionadas y que en la película representan los personajes de Gosling y Stone (sería bonito escribir sobre esa analogía, teniendo en cuenta quién es Chazelle). Uno ve reflejada su pasión por estos temas, y esta película viene a celebrar que hacen la vida mejor. Es imposible no sentirse acompañado para muchos.
Poco que decir de la música y las canciones, claro, la banda sonora ya viene de camino a casa.
Y cuando uno ya estaba convencido de la grandeza de la película, asiste a ESE FINAL...
el momento del beso "imaginario" entre Gosling y Stone es uno de los momentos más emocionantes que he vivido en una sala de cine... esa vida alternativa vivida a través de la magia de la música... esa conexión entre ambos que ya no se perderá... me recordó a Los paraguas de Cherburgo, pero más grande. Es lo que termina de convertirla en una película ETERNA.
En fin, me vais a perdonar lo atropellado y desorganizado que me ha salido el comentario, pero es que en esta ocasión la emoción me desborda y me resulta difícil expresarme mejor. Ya estoy planeando un segundo visionado (de los muchos que voy a disfrutar) y espero escribir algo más articulado. :sudor
Nota (y creo que es la primera vez que la uso aquí): un
10 como una casa.