No es extraño que a muchos nos haya parecido igual la historia a la que tiene lugar en The Miracle Worker, por la que recibio el oscar a mejor actriz, Anne Bancroft, en 1962.
El guión de aquella película de Arthur Penn, firmado por William Gibson, tenía como base la autobiografía de Helen Keller, que es la (niña) protagonista de La historia de Marie Heurtin.
Es decir, la misma historia contada medio siglo después, de nuevo.
Particularmente, añado dos datos favorables: también me impactó El milagro de Anne Sullivan y además, cada vez que veo el sello de A contracorriente de por medio, ya me da confianza.
La veré, seguro.