A tu primera pregunta, claro: en ese pueblo reina una conspiración de silencio. Todos tienen trapos sucios. Quienes se llevan los electrodomésticos del padre son la gente de la vidente, ya que les ha robado un alijo de droga y la ha vendido. La vidente, realmente, no ha "vislumbrado" nada del caso. Sus gentes vieron actuar al ejecutor de las niñas, y ante el riesgo de que se mezclaran sus trapicheos con la investigación, les dice lo que estos han visto a los polis de manera sobrenatural. En su segundo encuentro, cuando se ven acorralados por las autoridades, pactan "declarar" lo que han visto, con la promesa de que ignoren su mafiosa red de drogas. Pero algo de pitonisa sí tiene, ya que ve próxima la muerte de Gutiérrez (evidente que está enfermo).
Yo no creo que sea un ajuste de cuentas. Lo veo más como un ser retorcido (el capataz) que paga a escoria de los bajos fondos para saciar sus depravaciones, de tal manera que jamás se mancha las manos. Vamos, lo que pasó con las niñas de Alcasser.