He editado mientas has contestado. Y sí que es un drama basado en la novela de Selma Lagerlöf, pero que se apoyaba en una fantasmagoría tremebunda, digna del mejor expresionismo germano: si alguien se suicida en la víspera de Navidad, pasa a ocupar el pescante de la carreta fantasma. De crío leí que la secuencia en la que entra dicha carreta en la biblioteca del suicida era de lo más fantasmagórico del cine silente. Lo comprobé muchos años después.