Yo salí por Madrid el sábado pasado para dar una vuelta sin saber que era la noche en blanco esa ... y juro que para el próximo año estaré pendiente de saber cuando toca para quedarme en casita o al menos bien lejos de Madrid capital. Además de tener que aguantar por las calles una cantidad absurda de gente deambulando de una lado hacia otro sin saber muy bien adónde van o de dónde vienen, tuve que soportar 2 horas y media de cola para coger un búho que me permitiese volver a Getafe. Y ya no sólo es aguantar de pie con el fresquito que hacía, sino aguantar cómo los jetas intentan colarse o cómo las marujas paranoicas te acusan a tí de colarte (a mí me pasó eso, y acabé a gritos con la señora en cuestión, mandándola literalmente a tomar por culo), por no hablar de las trifulcas que se montaban cada vez que venía un autobús. Que esa es otra, el ayuntamiento tuvo la genial idea de mantener los horarios de los búhos como si de una noche de sábado normal se tratase, poniendo eso sí UN autobús de más de la línea 805 cada vez que tocaba búho, cosa que daba risa viendo la cola que se formó frente al Burrikín de Santa María de la Cabeza (cambiaron la ubicación de la parada para no colapsar de gente la glorieta de Carlos V) y que daba la vuelta a la esquina metiéndose en la calle que baja hacia Embajadores.

En definitiva, un puñetero infierno, cuyo único interés (algo enfermizo eso sí) fue meterme en la Fnac a la 1 de la noche para mirar pelis como si de un día laboral se tratase.

En fín, cuando vuelva a suceder la noche en blanco ésta, sólo queda decir aquello de "¡Corred insensatos!".

Un saludete.