Tras el bochornoso título de distribución español "Mi novia es un zombie" (suena como a canción de Alaska y Dinarama) se esconde "Dellamorte Dellamore", posiblemente la última gota de calidad del otrora torrente de maravillas de todo tipo que fue el cine de terror italiano, con permiso de "L'Arcano Incantatore" de Puppi Avati (que para mi gusto es incluso mejor: obra maestra). A mí me encanta.

Obra del que era la gran promesa Michelle Soavi (pupilo de Dario Argento), tras sacudirse la marcada influencia de la producción de Argento, con la que no parecía encontrarse del todo a sus anchas vistos los semi-exitos/semi-fallos (cuestión de ver el vaso medio lleno o medio vacío) de "La secta" y "El engendro del diablo", aquí logra reencontrar su propio camino, potenciando los aspectos góticos y barrocos que ya estaban en el aspecto formal de "El engendro del diablo", y fabricando una imaginaría visual poderodísima que ya por sí sola merece la pena y marcan la película de principio a fin. El espacio filmico del cementerio, único terreno en el que el personaje está cómodo, nos atrapa en un mundo personal, onírico y muy cargado de simbolismos.

Respecto a la historia, está cargada de lectoras metafóricas, desde sociopolíticas a psicoanalíticas e incluso existenciales. En un mundo tan absurdo como el de la Italia de esta época, y por extensión el de cualquiera de nuestros países, el hecho de que los muertos resuciten y caminen buscando carne humana no tiene nada de particular, de ahí que el protagonista ni tan siquiera se extrañe y mucho menos dé la alarma de lo que está ocurriendo en su cementerio. La búsqueda del eterno femenino es otro de los temas clásicos de la película. Todo ello, tamizado por un sentido del humor directamente extraido de los comic Bonelli, como Dylan Dog (el detective que lucha contra lo sobrenatural y contra multiples monstruos, ayudado por su fiel Watson particular... que no es otro que ¡Groucho Marx!), y sin faltar el impacto del gore típico en las películas de zombies. Onírica, abierta a interpretaciones, extraña, poderosa, resbaladiza, "Dellamorte Dellamore" es una película cuanto menos interesante, que nada tiene que ver ya con los clásicos del gótico pero que parecía que abría una vía nueva.

Lamentablemente, y según nos contó a un grupo de gente Sergio Stivaletti en la Semana de Cine Fantastico y de Terror de San Sebastian del año pasado, Soavi parece haber tirado la toalla definitivamente, y así como también nos dijo que Lamberto Bava estaba trabajando en una nueva película (supongo que tan barata como la del propio Stivaletti), que Michelle Soavi ni siquiera se planteaba de momento volver al 35mm, y mucho menos al género, que de momento está muy feliz trabajando en TV, y que tal y como están las cosas en Italia no había muchas esperanzas. Lastima de cinematografía, lo que fue... y lo poco que es.