mi escena favorita de la peli, y no implica a Christopher Lee (cuya maldad, aún siendo gloriosa en pantalla, es más evidente) Lucy aparece en el cementerio en el que su hermano y Van Helsing esperan agazapados. La escena es sobrecogedoramente hermosa: La joven luce un camisón virginal, y lleva a una niña consigo como si estuviera jugando con ella; el escenario es un delirio de tumbas góticas, niebla e iluminación colorista. Cuando se encuentra con su hermano, sonríe dulcemente mostrando sus dientes de vampiro e intenta seducirlo... Tan solo la fanática obstinación de Van Helsing puede resistirse a su hechizo.