Lástima de secuela mediocre y desnaturalizada. Afortunadamente, con Warrior Blade: Rastan Saga III, con su demencial "aspect ratio" y sus desproporcionados gráficos recuperaron el crédito perdido. Era de no creerlo, y eso que nosotros la descubrimos años más tarde, porque se quedó en Japón...
P.D I- Bendito M.A.M.E
P.D II- Disculpad el off-topic.