Algunas foticos de las pruebas de maquillajes para algunas víctimas:







Al llegar las horas en las que los estómagos hacen runrún, había que sacar las perolas para que el personal recuperara fuerzas. Por grupos, y aprovechando a veces los propios decorados, se apilaba el personal. A veces era en un local cedido por el Ayuntamiento, con capacidad para los cincuenta o sesenta implicados en esa jornada. Se demuestra aquí que Producciones Diodati no sólo ofrece un triste bocata y una cerveza a los artistas y técnicos. No somos Hollywood pero se hace lo que se puede...