"Los vecinos suelen llevarle a uno flores cuando se muere, libros durante una enfermedad, y otros regalos en distintas ocasiones.
Boo era nuestro vecino, y nos había regalado dos muñecos de jabón, un reloj roto con una cadena,una navaja... y nuestras vidas.
Atticus había dicho una vez que nunca se conoce realmente a un hombre hasta que uno se ha calzado sus zapatos y caminado con ellos. Sólo con permanecer en el porche de los Radley bastaba para eso.
Aquel verano que empezó, hacía largo tiempo había terminado, y otro verano ocupó su lugar, y luego un otoño... y por fin Boo Radley había salido.
En el futuro habría de pensar muchas veces en aquellos días: en Jem, en Tití, en Boo Radley, en Tim Robison... y en Atticus.
Él se quedaría toda la noche en el cuarto de Jem, y estaría allí aun cuando Jem despertase a la mañana siguiente."


(Matar a un ruiseñor)


- "Podías haber ido allí arriba. Todavía puedes ir..."
- "No cielo, ahora soy una anciana. Prefiero que me recuerde tal como era."
- "¿Cómo sabes que está vivo?
- "No lo se. No lo se seguro, pero... creo que sigue vivo. Verás, antes de que él llegara no nevaba nunca. Y después si. Si no estuviese allí arriba ahora no creo que nevase. A veces todavía me puedes ver bailando bajo la nieve..."


(Eduardo Manostijeras)