La otra noche puse en casa Infierno blanco (The Grey, Joe Carnahan), un drama de aventuras, protagonizada por el omnipresente Liam Neeson.
La cinta tiene ya diez añitos, pero por una razón u otra,no había intentado verla hasta ahora.
Un tipo que trabaja como cazador de lobos, al servicio de una refinería situada en Alaska, y al que muchas esperanzas en la vida no le quedan en ese momento, ve como su avión, al regreso a casa, sufre un accidente.
Tanto él como los que quedan vivos, deben sobrevivir e intentar llegar a la civilización, antes de que los lobos acaben con ellos.
Pareciera que he destripado el asunto o que hemos visto esta peli otras veces, pero aunque cierto en ambas, aún quedan sorpresas o "novedades" que nos harán vivir con muchísima tensión y sobre todo, dolor, lo que le depara el futuro a estos supervivientes.
Sobre todo, destaco un notable elenco de actores, capitaneados por el siempre solvente Neeson, o actores como Frank Grillo, curtidos en esto de la acción. Nos permite conocer un grupo muy heterogéneo de personas, cada una con un carácter distinto y circusntancias personales muy diferentes, e incluso motivaciones en la vida totalmente contrarias.
El primer obstáculo es poner a todos de acuerdo. Y el segundo, la naturaleza. El frío casi polar y la presencia constante que sobrevuela de los lobos, auténticas máquinas de matar en su hábitat, se tornan protagonista absoluto y hace que los humanos queden rezagados en un segundo plano.
Por tanto, y aunque hayamos visto otras propuestas similares (véase esa Viven!), aconsejo darle una oportunidad. No es una película pretenciosa y lo mejor de todo, es que consigue hacerte pensar y que no se te vaya de la mente durante días.