Al principio me enganchó por los aspectos visuales (algunos muy logrados), un lenguaje algo publicitario, pero atractivo. Pero a medida que fue avanzando la película, me fui aburriendo como una ostra. No hay historia, aunque parezca que hay muchas, no hay personajes, es pedante pero no profunda. El mensaje: "pequeñas elecciones pueden provocar grandes cambios en tu vida", lo hemos visto ya mil veces y mejor hecho.