Dado que era una tienda de comics, hablamos sobre todo del libro y su relación con los superhéroes. De nuestro trabajo de traducción creo que hablamos un poquillo, aunque no me acuerdo muy bien. Nos felicitaron por las copiosas y utilísimas notas a pie de página, y se felicitó al maquetador - el de verde - por ponarlas eso, a pie de página, y no al final.

De bebidas, nada de nada. Canapés, nanay. Y chicas, sí, como espectadoras, y de la editorial.