Donald Sutherland también tiene que decir la suya, aunque no se le ve tanto como en las anteriores. Aquí le dan más empuje al personaje interpretado por Julianne Moore. Y el malogrado Philip Seymour Hoffman tiene sus secuencias contadas con los dedos de las dos manos.
Eso sí, los efectos especiales, en general, están muy bien trabajados, dejando de lado estos bichos que aparecen en un momento del metraje y que parecen sacados de la película Soy leyenda. Son para darles de comer aparte. En cuanto al diseño de producción, las localizaciones están muy bien elegidas. La banda sonora vuelve a cargo de James Newton Howard con otro buen y apreciable trabajo. Tenéis que quedaros durante todos los créditos finales, sus notas se escuchan hasta el final de estos. Nada de canciones pop, ni falta que hace.
Y bueno, no tengo nada más que añadir. Indispensable de ver para cerrar otra saga más de novelas adaptadas a la gran pantalla. Y van. Dentro de poco nos llegará el final de la saga de Divergente. Estaremos preparados. Pero antes os dejo mi nota final de esta Los juegos del hambre: Sinsajo. Parte 2 que es de 8/10.