Coincido plenamente contigo, caro amigo, pero ya digo que EL GATOPARDO es la excepción que confirma la regla.
Hay voces y doblajes que se me han grabado a fuego desde mi infancia como los de EL PLANETA DE LOS SIMIOS, TIBURÓN o LA GUERRA DE LAS GALAXIAS o...
... curiosamente EL GATOPARDO...
... que seguramente vi por primera vez en blanco y negro y en formato cuadrado (¡!)...
Esa es la grandeza del cine.
Los que hemos aprendido a amarlo no en las salas comerciales (en mi pueblo el único cine que había desapareció siendo yo muy niño)
sino a través de la televisión.
Así es la vida.
