El tema de los chinos no tiene nada que ver con escuchar como cae la moneda, ni nada por el estilo. El truco está en que han conseguido un método matemático para acertar las probabilidades de cada jugada. Es como lo del hombre aquel que se dedicaba a ir de casino en casino con sus hijos, limpiándolos todos.
Simplemente saben que rodillo girar en cada momento y, después de cuarenta o cincuenta jugadas, sacan el premio.