"En mis tiempos los hombres no eran tan mariquitas como ahora"

Sin duda lo más destacado del film son las escenas con el viejito y sus diálogos de manual de que mis tiempos siempre fueron mejores. El momento donde chupa el dedo de la Katy, me recuerda cuando los padres, en nuestros tiempos, mojaban nuestro chupete en cava para enorgullecerse de que su hijo de apenas x años le encanta el cava catalán. El momento de la nuez, partiéndola con el antrebrazo, o los momentos de bailoteo, una delicia de escena con el viejito de abanderado.

Lo demás, sí, es un film que se deja ver, llevado por unos personajes muy definidos, por ejemplo, parece que es marca de la casa, la dualidad en los personajes femeninos, una femme fatale, evidentemente la Katy, y otra en el polo apuesto, totalmente angelical y buena gente. También hay momentos para la sensualidad, con Katy Jurado al mando, pero más comedido que en film anteriores. Es la sensación, quizá psicológica, de estar viendo cine de barrio mexicano, sobretodo en escenas más corales donde se le ven las costuras a muchos actores, si lo fueren o lo fuesen. El film ganas en espacios cerrados y reducidos, a dos o tres manos. El contexto social, que lo hay, queda para mi difuminado, ya que se vuelca mucho en el aspecto más romántico de el Bruto y esa dualidad sexual.

En resumen, mejor de lo esperado, pero sin llegar a los niveles, de él, el gran calavera y evidentemente los olvidados